Pensaron que eran rayos porque la descarga eléctrica iluminaba las ventanas de sus casas igual como si hubiera una tormenta, pero cuando los vecinos se asomaron a mirar, se dieron cuenta de que uno de los postes de la calle Serena, en el sector de Ramón Ángel Jara, en Belloto-Sur, iba a explotar.
Eran las 19.00 horas. Ya estaba oscuro, pero los residentes no tardaron en descubrir qué provocaba las chispas: un hurto de energía. “Aquí muy cerca hay una toma y se sabe que algunas personas de allí roban luz, colgándose de los postes. Ya lo hemos advertido en reiteradas ocasiones, pero ahora ya pasó a mayores porque hubo una explosión que nos asustó bastante, porque por ahí pasa gente. Pudo haber sido una tragedia”, contó un hombre, que pidió reserva de identidad.
Más tarde, Chilquinta Energía informó que tomó conocimiento de la denuncia. “El lunes 20 de mayo de 2019, a través del Contac Center fue recibida la información de incidentes en líneas de baja tensión, en calle Ramón Ángel Jara (Belloto). Presuntamente se habría tratado de un intento de hurto de energía, que no generó interrupción en el suministro de nuestros clientes”, detalló en un comunicado.
La empresa agregó que personal especializado se dirigió al lugar, pero que no encontró indicio de los hurtadores. “Sin embargo, como compañía iniciaremos acciones legales contra quienes resulten responsables, dado el riesgo que este tipo de delitos puede ocasionar a las personas y las instalaciones”, declaró.
El hurto de energía eléctrica es considerado un delito en nuestro país, por lo que los responsables de este hecho podrían arriesgar multas. “Colgarse” a los postes, además, podría implicar otros problemas graves como incendios, accidentes de tránsito y daños a electrodomésticos.
Por lo anterior, la empresa hizo un llamado a que las personas denuncien cuando sean testigo de estos ilícitos. Para tales efectos están disponibles sus redes sociales (Facebook: Chilquinta Energía y Twitter: @Chilquinta y @Chilquinta 600), la aplicación para smartphones ChilquintaApp y los números 600 600 500 y 32 22 65 300 (para teléfonos fijos).
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