Fuente: Artículo de Unicef

En el artículo publicado por la Unicef, se conversó con Francisco Aguayo, sicólogo, Magíster en Estudios de Género de la Universidad de Chile e investigador en paternidad, con gran experiencia en este ámbito, sobre cómo pueden los padres apoyar a sus hijos e hijas y acompañarlos durante la pandemia. En su opinión, lo más importante es darles seguridad y tranquilidad, aprovechar el confinamiento para estrechar el vínculo con ellos, expresarle mucho afecto y disfrutar la oportunidad de estar más tiempo juntos.  Declara la nota de Unicef.

Francisco Aguayo explica que cuando el padre está involucrado, con una presencia de calidad en el cuidado de sus hijos e hijas, impacta positivamente en distintos ámbitos de su desarrollo: su autoestima, habilidades sociales, bienestar económico, rendimiento académico, entre otras. “Se ha estudiado que niñas con un padre involucrado crecen más empoderadas y que niños con un padre participativo están más educados en la igualdad de género”. Eso es lo que se conoce como paternidad activa: papás involucrados en el cuidado y la crianza de sus hijos e hijas.

El especialista agrega que hay distintas formas de ejercer una paternidad responsable: “estar disponibles y atentos a las necesidades de sus hijas e hijos; tener una presencia de calidad, aunque trabajen mucho tener una presencia psicológica importante y saludable… la importancia de disfrutar la paternidad y el cuidado…construir un vínculo emocional con cada hijo e hija, así como proveer económicamente y hacer tareas domésticas”.

Francisco Aguayo ha sido consultor de UNICEF en temas de corresponsabilidad y paternidad actividad y ha colaborado en el desarrollo de guías, publicaciones y talleres sobre este tema.

“Compartir, reír y jugar, mantener el buen humor y la creatividad son claves para sostener una situación tan larga y amenazante como la actual”.

En el contexto de la pandemia, donde los padres están viviendo un confinamiento con sus hijos e hijas como no se había visto en la historia reciente, el especialista señala que el concepto de ‘paternidad activa’ recobra importancia. “El confinamiento con los hijos e hijas trae oportunidades de pasar más tiempo, de compartir y aprender cosas juntos. Para los que están en casa haciendo teletrabajo pueden compartir la cotidianeidad, aunque también el trabajo suele ser una amenaza para estar presentes. Muchos padres y madres se sienten agobiados por las demandas del trabajo, del cuidado de los hijos y por las tareas domésticas”.

Según el especialista es muy importante cuidar y apoyar a los hijos e hijas según sus edades y estar atentos a sus necesidades y emociones, para ayudarlos a “sobrellevar esta experiencia nueva, incierta, amenazante, larga y trágica para muchos”. Aconseja no exponer a los niños y niñas, sobre todo a los más pequeños, a las noticias, ya que en estos días estamos expuestos a muchas informaciones adversas que los pueden afectar de manera negativa. “Es clave dar tranquilidad y seguridad de que esto va a pasar y que los adultos a cargo están haciendo todo para cuidarlos. También es importante escucharlos, mirar atentamente sus dibujos, preguntarles por lo que hacen o están leyendo, contarles historias, jugar físicamente…”.

Propone aprovechar la convivencia para estar más presentes, compartir las tareas de cuidado y conocer más a los hijos e hijas. Señala que esta puede ser una buena oportunidad para que los papás se hagan cargo de leer cuentos durante el día o antes de dormir, una tarea que habitualmente hace las mamás. “Aquí por ejemplo hay una tarea fundamental que el padre que está confinado con sus hijos puede hacer regularmente”.

Para los padres que viven en el mismo hogar con sus hijos e hijas, les aconseja “aprovechar de dar abrazos, hacer contacto visual y físico. Compartir, reír y jugar, mantener el buen humor y la creatividad son claves para sostener una situación tan larga y amenazante como la actual. Hacer todas las actividades cotidianas que supongan compartir y aprender juntos: cocinar, hacer arreglos en casa, apoyar en las tareas escolares, investigar sobre cualquier tema con los hijos e hijas, hacer actividad física dentro de casa, conversar, ver un documental o una serie”. Cuenta que durante la cuarentena aprendió a hacer pan y lo comparte con sus hijos, y a preparar pizzas.

En el caso de los padres que no viven con sus hijos o hijas, Francisco Aguayo recomienda: “encontrar momentos para conversar, aprovechando la tecnología. Las comunicaciones virtuales son importantísimas, deben aprovechar al máximo el tiempo que pasan con sus hijos, pues los niños tienen derecho a mantener una relación con ambos padres y además a mantener un vínculo con su padre en tiempos de pandemia”.

Agrega que es importante que los adultos sean comprensivos “con el agobio, ya que son tiempos excepcionales tanto por los riesgos en salud como porque los niños no van a la escuela”. Recomienda a los papás estar atentos para reconocer los signos de estrés, malestar o angustia y no dejar que estos sentimientos impidan escuchar y compartir con los hijos e hijas. “Para algunos manejar la irritabilidad será clave para cuidar con buen trato. Cuidar la salud mental. Mucho diálogo, comprensión mutua y flexibilidad con la pareja o la madre de los hijos es fundamental”.