Fuente: Senama

Las personas mayores han sido uno de los grupos más afectados por la emergencia sanitaria que enfrentamos por el Covid-19. Es así como desde el inicio de la pandemia, las autoridades implementaron una serie de medidas con el fin de resguardar su salud, protegerlos y evitar exponerlos al contagio. Señala la nota oficial.

Una de las principales medidas, fue la cuarentena obligatoria que se estableció, en primera instancia para las personas mayores de 80 años (desde el 22 de marzo) y que posteriormente y ante el avance del virus, se amplío a los mayores de 75 años, quienes se encuentran confinados desde el 15 de mayo.

Es así como luego de más de dos meses de encierro prolongado y con el fin de contribuir a mejorar su salud mental y física, fuertemente afectadas por las restricciones, las autoridades de gobierno determinaron implementar un permiso especial para que las personas mayores puedan salir a caminar.

De esta manera, desde el sábado 25 de julio, los mayores de 75 años que residan en comunas que se encuentren en los pasos 1 (cuarentena) y 2 (transición) podrán salir durante 60 minutos, entre las 10 y las 12 horas los días lunes, jueves y sábado, portando su cédula de identidad y pudiendo ser acompañados por otra persona. En tanto, quienes residan en comunas que se encuentren en los pasos 3 (preparación) y 4 (apertura inicial) podrán salir durante 60 minutos, entre las 11 y las 12 o entre las 15 y las 16 horas, todos los días de la semana, también con su cédula de identidad y acompañados por una persona.

“Las personas mayores han sido uno de los grupos más vulnerables frente a la pandemia y los efectos que está ha tenido en la calidad de vida. Por eso, y con el fin de contribuir a mejorar su bienestar personal, es que hoy se anuncia esta nueva medida que les permitirá salir y mantener una rutina física, siempre manteniendo medidas de seguridad, como usar mascarilla y distancia. Son cerca de un millón de personas mayores de 75 años las que se verán beneficiadas, luego de haber permanecido más de dos meses en cuarentena”, aseguró el ministro de Desarrollo Social y Familia, Cristián Monckeberg.

Para hacer uso de este permiso, se debe cumplir con las medidas preventivas que rigen para toda la población, como el uso de mascarillas y manteniendo la distancia de al menos un metro con otras personas. Además, deberán evitar aglomeraciones y no estará permitido el ingreso a lugares cerrados. Se recomienda también el lavado de manos con abundante agua y jabón al regresar al hogar y quitarse los zapatos y la mascarilla antes de entrar.

El director nacional del Servicio Nacional del Adulto Mayor, SENAMA, Octavio Vergara, valoró la iniciativa y precisó que “esta es una solicitud de las propias personas mayores, que contribuirá a cuidar su salud mental y su salud física. Sin embargo, es fundamental que continúen respetando las recomendaciones que buscan prevenir contagios, por lo que el llamado es a la responsabilidad al momento de salir”.

Por su parte, el presidente de la Sociedad de Geriatría y Gerontología de Chile, Dr. Gerardo Fasce destacó que “el hecho de estar en un espacio reducido afecta a la masa muscular, afecta la estabilidad, la capacidad de movilizarse, por lo cual, el poder salir a caminar va a permitir que recuperen esa fuerza, esa musculatura, mejoren la marcha, mejoren la estabilidad y disminuyan los riesgos, por ejemplo, de caídas y posibles fracturas”.

En tanto, Lucy Vera, representante del Consejo Asesor de Mayores agradeció la medida y señaló que “esta era una gran necesidad que tenemos, yo he hablado con muchas personas mayores y todos sentimos lo mismo. En la casa caminamos, pero es por un tramo muy corto, y aunque hagamos ejercicio, no es lo mismo que salir a caminar. Tenemos problemas de circulación de la sangre, nos estábamos poniendo nerviosos, el sueño lo tenemos alterado, así que esto es muy importante para todas las personas mayores”.

A su vez, la psicóloga  y presidenta de la Fundación Míranos, Ana Paula Vieira resaltó que “esto va a contribuir para que las personas mayores puedan sentir, aunque de una forma distinta, que la vida continua. Retomar las actividades, los proyectos de vida, aquellas cosas que se dejaron de hacer, tanto laborales como de distracción de manera paulatina va a contribuir a minimizar esa sensación de desesperanza que hemos escuchado en varios de ellos”.