Carlos Muñoz, futbolista formado en la cantera de Santiago Wanderersvio desde la distancia como el club de sus amores re tornaba a la Primera División.

“Se sufrió demasiado, cuando se descendió fue terrible, los dos años en Primera B se hicieron muy largos. Todo lo que pasó, la situación país, al final se traspasó al fútbol y también lo sufrió Wanderers en primera instancia, con una injusticia que lo hacía quedarse otro año en Primera B, pero afortunadamente recapacitó la gente que tenía que hacerlo y se pudo dar como justo campeón a Wanderers”.

“El regreso siempre va a ser parte de lo que quiero. Yo soy hincha del club, me encantaría volver, pero no depende de mí, hay un técnico, están los dirigentes que son los encargados de ver lo que realmente quieren para Primera División, tienen que ver si encajo en los planes y en el perfil del equipo. Las ganas de uno siempre van a estar, pero entendiendo que las decisiones no pasan por mí. Yo estoy esperando, quedé libre, con el pase en mi poder, entonces estoy viendo, barajando opciones y esperando que se me pueda abrir alguna puerta, pero siempre, lógicamente, van a estar en mi cabeza las ganas de volver a Wanderers”.