El gobierno decidió modificar el sistema de compra de los centros médicos para evitar deudas prolongadas.

Mauricio Cancino, médico del Hospital Carlos Van Buren de Valparaíso, señaló que debido a estas medidas han afectado el funcionamiento del establecimiento; “el presupuesto de $18 mil millones se acababa finalizando abril o principios de mayo y se hacían expansiones presupuestarias directamente de la Dipres hacia los hospitales cada dos o tres meses y así se seguían comprando bienes y servicios, entre ellos insumos y fármacos”.

“Todos los años los hospitales funcionan endeudados sabiendo que la salud es un saco que lamentablemente no tiene un fondo establecido. Por lo tanto, el hospital funcionaba y se podría dar una seguridad de la atención de todos los pacientes”.

“Se nos informó que iba a cambiar el sistema y no se nos iba a entregar extensión presupuestaria sin mostrar primero cifras de producción, en marco de esta política de reducción del gasto.El sistema cambió para todos los hospitales de Chile y todos se han visto afectados”.