Paola Naranjo, deportista chilena recordó su infancia al señalar que; “Me encantaba la gimnasia, el ballet, atletismo, en fin, muchos deportes. La profesora de Educación Física decía, ‘necesitamos esto para hacer no sé qué cosa’ y ahí estaba yo”.

También hablo sobre la lucha constante con la que lidian las deportista femeninas; “los logros han correspondido a los equipos femeninos por sobre los masculinos; y, sin embargo, la preparación, la inversión, es más para los hombres que para las mujeres. Imagina si hubiese sido al revés, quizás qué logros aún más altos se hubiesen alcanzado”.

“Nosotras no tenemos contrato de trabajo, no existe eso; en la selección no hay contrato. No hay seguro tampoco, o sea si uno se accidenta es súper difícil la recuperación. Todo ese tema está muy, pero muy en pañales. Pero bueno, es un problema del que podríamos hablar toda una noche y creo que en las otras federaciones debe ser exactamente lo mismo”.

“Mi discurso habitual con los apoderados es que dejen a las chicas pasarlo bien, que las dejen disfrutar, encantarse. Como es un deporte colectivo quizás hay una que no es tan alta, pero que puede hacer otras posiciones. Hay quienes son más defensivos, otros que son más goleadores y así sucesivamente; el entrenador verá cuál es su función dentro de la cancha”.