Revuelo causó a través de la redes sociales la foto de una burrita tumbada en el piso -y literalmente patas para arriba-, mientras llevaba carga en ambos costados de su lomo.

La imagen fue publicada como denuncia de maltrato y explotación animal, y generó diversas reacciones de repudio.

Incluso la gobernadora de Valparaíso, María de los Ángeles de la Paz, salió al paso tras ver la fotografía y aseguró que la Gobernación Provincial realizó una denuncia en la Subcomisaría de Las Cañas, para verificar si el animal se encuentra en buen estado de salud.

“Ahora lo que corresponde es que la Fiscalía verifique el estado de salud del animal, y sociabilizar con los propietarios de esta burrita. Lo más probable es que haya una acción no intencionada y que debido a las condiciones climáticas se haya producido algo fortuito”, afirmó la autoridad.

Resbalón

Por otro lado, y como suele ocurrir con las denuncias en redes sociales, no había mayores datos sobre quién era el humano responsable del animal, ni en qué circunstancias ocurrió el hecho, solo decía que fue en el cerro El Litre.

Lograron dar con el paradero del dueño de la burrita, Patricio Jorquera, quien vive en cerro Las Cañas y quiso entregar su versión de lo que pasó ese día. Además, negó rotundamente que él maltrate a sus animales.

“Yo tengo 65 años y desde los 10 años que crío animales. Tengo una burra más y un potrillo. La burrita se llama Chimultrufia, tiene tres años y medio, y está preñadita, por eso no lleva cargas pesadas”, aseguró don Patricio.

Y añadió: “Lo que pasó es que ese día empezó a lloviznar. Nosotros íbamos subiendo con tres fardos de alfalfa, que es el alimento de ellos. Yo quería asegurarme de que tuvieran comida suficiente para los días de lluvia. Pero se soltó una de las huinchas y ella perdió el equilibrio, y como el piso estaba jabonoso, se resbaló”.

Agregó que “yo me asusté. Vi que no se le había torcido el cogotito y ahí la ayudamos a pararse. Pensé que había perdido su cría que está gestando, pero menos mal que están bien los dos. Yo crío animales porque me gustan no para trabajar, Es una tradición familiar”, aclaró Jorquera.